Bolivia es uno de los países con mayor población indígena de Sudamérica y posee una abundante riqueza lingüística. A la fecha, cuenta con más de 30 lenguas nativas reconocidas como lenguas oficiales, además del español.
Con la finalidad de conservar, promocionar y valorizar estas lenguas, desde el año 2012, el gobierno boliviano ha implementado políticas lingüísticas específicas como la Ley General de Derechos y Políticas Lingüísticas que pretende fortalecer el uso de los idiomas nativos dentro del sistema educativo boliviano y regula que los niños, hablantes de una lengua nativa, deben realizar sus estudios en su lengua nativa.
Al respecto, la Ley Avelino Siñani-Elizardo Perez, promulgada el 20 de diciembre del año 2010, determina que “la educación es intracultural, intercultural y plurilingüe en todo el sistema educativo” (Estado Plurinacional de Bolivia, 2010: art. 1 inc. 6), que debe estar “orientada a la reafirmación cultural de las naciones y pueblos indígena originario campesinos” (Estado Plurinacional de Bolivia, 2010: art. 3 inc.1), que se debe buscar la universalidad de “los saberes y conocimientos propios, a fin de alcanzar el desarrollo de una educación desde las identidades culturales” (Estado Plurinacional de Bolivia, 2010: art. 4 inc. 3); así mismo, insta al desarrollo de programas educativos que sean “pertinentes a cada contexto sociocultural, lingüístico, histórico, ecológico y geográfico, todos ellos sustentados en el currículo base de carácter intercultural” (Estado Plurinacional de Bolivia, 2010: art. 5 inc. 15). En este sentido, las normativas legales antes mencionadas instruyen, de manera clara y específica, que en poblaciones o comunidades monolingües y de predominio de la lengua originaria, la enseñanza dentro de los niveles iniciales debe realizarse en la lengua nativa de los estudiantes y el español deberá ser abordado como segunda lengua (Estado Plurinacional de Bolivia, 2010: art. 7 y Estado Plurinacional de Bolivia, 2012: art. 6 inc. 1). Sin embargo,¿sucede así en la realidad educativa? ¿Las normativas legales son aplicadas dentro de los contextos educativos rurales? ¿Se enseña el español como lengua segunda? ¿En base a las normas legales vigentes, los currículos educativos consideran la lengua a usar dentro del aula?
Cada uno de estos cuestionamientos son el punto de partida para analizar la aplicación y efectividad de las leyes y normativas que regulan el uso de una L1 o L2 dentro del sistema educativo boliviano.
Para este acometido, el análisis en cuestión se enfocará en el bésɨro, también conocido como chiquitano, lengua originaria de la Chiquitania boliviana que actualmente se encuentra en proceso de revitalización y que, según las políticas lingüísticas actuales, debería recibir un tratamiento prioritario “en la planificación lingüística, educación intracultural intercultural plurilingüe, investigación y publicación de diversos tipos de textos por parte del Estado Plurinacional de Bolivia.” (Estado Plurinacional de Bolivia, 2012: art. 9).
Bibliografía
Estado Plurinacional de Bolivia (2010). Ley de Educación N.º 70 “Avelino Siñani-Elizardo Perez”. La Paz: Gaceta Oficial. https://bolivia.vlex.com/vid/ley-n-070-educacion-686802333
Estado Plurinacional de Bolivia (2012) Ley General de Derechos y Políticas linguísticas N.º 269. La Paz: Gaceta Oficial. <https://www.lexivox.org/norms/BO-L-N269.xhtml>
Sichra, I. (2016). Políticas lingüísticas en familias indígenas: cuando la realidad supera la imaginación. UniverSOS, 13, 135-151. <http://bvirtual.proeibandes.org/bvirtual/inge/cuando%20la%20realidad.pdf>
Vaca, C. (2022). Educación patrimonial, interculturalidad y autonomía educativa para Bolivia, desde la ecorregión chiquitana. Revista Ciencia Y Cultura, 26(48), 135–158. <https://doi.org/10.35319/rcyc.2022481276>
On August 4th, 2020, the most powerful non-nuclear explosion in world history detonated in Beirut’s harbor. Partially caused by political neglect, the blast destroyed the city. As a member of the Lebanese diaspora since childhood, I witnessed this catastrophe from afar on social media through the lens of my phone. Mere hours after the initial blast, videos of the damage were circulated, intertwined with a wide range of testimonies shared by survivors. They expressed their fear of history repeating itself, after a civil war that started in 1975 and never properly ended in 1990 (“We kept activating war policies in a time of peace”, the historian Chloé Kattar explained to me when I interviewed her), because of an amnesty law that transformed into a collective amnesia.
A few weeks after the blast, thanks to an online call for testimonies, I gathered texts and artifacts produced by survivors and members from the Lebanese diaspora, which ranged from journal entries to poems, dream reports to performances and even included a work-in-progress graphic novel. Many of those writers were young and expressed a similar concern: intergenerational trauma, described by one of the writers as “a parasite that sucks up all their hard work and brainpower, leaves them numb with a false sense of hope, prevents them from sleeping at night, and guilt- trips them into staying whenever they try to leave the country”. They expressed themselves in French, English, and/or Arabic.
As the explosion felt like history repeating itself, those writers share, via posts on social media, the emotional and psychological impacts that such events had on the city, its inhabitants, and their mental health. How did the amnesty law impact a generation’s psyche and way of expressing themselves? How did forgetting to become a political and psychological coping mechanism, and what are the echoes of such a process today, three years after the blast?
In this presentation, inspired by Marlene Hirsch’s studies on post-memory, and through literary analysis, I will explain how those testimonies, produced right after the Beirut blast, highlight the fact that the civil war trauma was passed from one generation to the next in Lebanon, or within the diaspora. I will examine the diaries sent to me through a process of close reading and refer to translation studies to dwell on the issues of bilingualism and plurilingualism, in the context of a post-colonial Lebanon. I will also refer to psychoanalysis theory and historiography to better understand this archive. Through media studies and a transmedial analysis, I will finally examine the role of social media in the expression of today’s trauma and intergenerational trauma in Lebanon and the Middle East: in the aftermath of a catastrophe such as Beirut’s explosion, and does it contribute to shape a new language that embodies and express intergenerational trauma in a different way?
En el marco del decimoséptimo festival de cine Muestra Joven en el año 2018, un incidente de censura contra una película independiente sobrepasó, por primera vez desde 1961, los límites del espacio institucional y gremial en Cuba. Inesperada, la prohibición del Instituto de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) a la proyección del work in progress Quiero Hacer una Película, del realizador Yimit Ramírez, llegó al extremo de un enfrentamiento bastante mediático entre los organizadores del festival y las autoridades del Ministerio de Cultural y del propio ICAIC. La razón institucional para la exclusión: el supuesto menosprecio hacia la figura histórica de José Martí1. Dos años después, durante la decimonovena edición del mismo festival, se repetían tanto la historia de censura como la razón institucional, esta vez en “defensa” de la figura de Fidel Castro. La regulación del relato histórico es una de las formas de control ideológico, y en la mayoría de los casos también político2, y el proyecto de revolución cubana tuvo desde su misma fundación un interés explícito en el uso del cine como herramienta de dominación. Pretendemos presentar un esbozo de las políticas y acciones gubernamentales hacia la producción cinematográfica en los últimos veinte años, con el objetivo de sostener el gran relato de la historia oficial.
1 Uno de los más importantes personajes de la historia cubana, comúnmente llamado Héroe Nacional, y el principal líder de la Guerra de Independencia de 1995. Escritor y periodista, uno de los fundadores del modernismo literario en Latinoamérica.
2 Aguilar Fernández, Paloma (2008), Políticas de la memoria y memorias de la política. El caso español en perspectiva comparada. Madrid: Alianza Editorial, 583 pp.